Un viaducto es una obra de fábrica de gran
longitud con varias luces, en general no muy amplias, que salvan
vaguadas o depresiones por cuyo fondo puede o no circular una
corriente de agua.
En el caso de las líneas de alta velocidad las características
geométricas de los trazados, con radios de curva en planta
superiores a 4.000 metros y que tienden a situarse en el
intervalo de 6.000 a 7.000 metros da lugar a un importante
número de obras de fábrica.
Uno de los aspectos que cabe señalar en los nuevos puentes es la
necesidad de adoptar, en zonas concretas, medidas de protección
del material ferroviario frente a las acciones de vientos
laterales muy fuertes.
Entre los condicionantes tenidos en cuenta en el estudio de las
alternativas de construcción hay que destacar: la amplitud d
elos valles, las pendientes de las laderas, la afección de zonas
de aguas, la calidad de los terrenos o la accesibilidad de la
zona. Por ello es necesario adoptar algunas características
tipológicas y de diseño, el tipo de cimentación, la modulación
de los vanos, la tipología del tablero, los procedimientos de
construcción o la estabilidad de las laderas.
En todas las líneas de alta velocidad existen un número
importante de viaductos. Algunos de ellos resultan especialmente
interesantes por sus dimensiones, el diseño o bien por el
sistema empleado en su construcción.
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