Page 70 - 360.revista de alta velocidad Nº2
P. 70
Análisis de los datos de tráfico del primer año de explotación de
360. la línea de alta velocidad de Madrid a Valencia
360. revista de alta velocidad
Fernández, J.
tráfico en el tren (el coeficiente pasa de 0,72 sobre la media), mientras que ha pasado a ser el
mes de más tráfico en el avión (cuyo coeficiente sobre la media pasa del 0,82 al 1,23). Como
referencia, los coeficientes de estacionalidad mensuales que aparecen en García Álvarez et al.
(1998) para el mes de agosto son de 0,41 para viajes con motivo de trabajo, de 2,55 para viajes
con motivo de vacaciones y de 1,09 para familiares. Puede observase pues que la estacionalidad
de los tráficos ha cambiado totalmente, reflejando que el AVE ha pasado a ser utilizado
mayoritariamente por viajeros de negocio (coeficiente menor que la unidad), mientras que muchos
viajeros que se mueven por ocio o vacaciones han pasado a utilizar el avión (cuyo coeficiente pasa
de ser menor que la unidad a mayor que la unidad). En todo caso, los valores citados permiten
hablar de predominio de un motivo concreto de movilidad en cada caso, pero como puede
apreciarse comparando los coeficientes citados, se trata de una ruta en la que coexisten, en cada
modo de transporte, varias causas de movilidad. Los valores en todo caso están por debajo de
2,55 en el mes de agosto, lo que explicaría el elevadísimo número de viajeros del coche particular
en esta ruta.
Figura 9. Perfil de la estacionalidad mensual del tren y del avión en la ruta de Madrid a Valencia en 2010 y 2011
La observación de los tráficos mes a mes permite extraer otra conclusión y es que mientras que el
perfil del AVE en 2011 se han mantenido muy paralelo al avión en 2010 (y conforme mandan los
cánones de las rutas con predominio de viajes de negocio); en los meses después del verano (que
deberían haber sido los de más tráfico del año con máximo en octubre muy próximo a marzo), el
tráfico del tren ha bajado en unos 10.000 viajeros mensuales sobre los valores esperables. Ello
probablemente tiene que ver con la reducción de dos frecuencias dese el 1 de julio (pasó de 15 a
13 frecuencias diarias) con una reducción mensual de unas 32.000 plazas. De hecho, en el avión en
2010 en los seis primeros meses se trasportó exactamente el 50,2 por ciento de todo el año. Si en
el AVE no se hubieran reducido frecuencias desde julio de 2011, cabría esperar un porcentaje
similar, lo que hubiera llevado a 1.882.000 viajeros en el conjunto del año 2011; es decir, unos
42.000 viajeros adicionales (muy cerca de 100 viajeros por cada uno de los trenes que dejaron de
circular por la reducción de la frecuencia).
70 360.revista de alta velocidad/ número 2 • mayo 2012